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| TEMPORADA 2009 SEVILLA |
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CRÓNICA DE MANUEL MONTERO MEJORANDO LO ANTERIOR El primer toro de Curro Díaz salió enterándose de todo mirando mucho al público y sin fijeza en el capote y yendo a su aire, por ello tampoco quiso ver al caballo desarrollando sentido sin querer pelea, siempre pendiente del torero que estuviera detrás del que le presentaba la capa. En la muleta no pudo hacer nada más que perseguirlo por todo el albero, nunca paró de huir de Curro, abrevió el torero matándolo con habilidad lo más decorosamente posible. Su segundo era un toro bajo, bonita con muy bonita expresión, el toro que gusta en Sevilla recibiéndolo a la verónica muy bien llevándolo hasta los medios rematando con una media muy buena. Le midieron mucho el castigo en varas. Curro brindó al respetable, lo sacó a los medios por bajo y algún que otro pase de pecho. Se echó la muleta a la mano derecha le da distancia y lo cita, le da una tanda en redondo muy ligada, con temple y con mucha transmisión para los tendidos dejando tiempo entre tanda y tanda para darle aire. Coge la izquierda y al comienzo de la serie el toro lo ve y se lo echa a los lomos cayendo al piso de muy mala manera, enrabietando el torero que sigue toreando con mano derecha muy bien provocándolo pero ya el toro iba otra vez a su aire. Entró a matar a la suerte natural, pinchando sin soltar y evidenciando mansedumbre el toro, dando una estocada sin puntilla lo pasaportó. Toreó de muchos quilates con adornos de la escuela sevillana que tiene en su tauromaquia este torero. Cortando una oreja que paseó en una vuelta al ruedo. El segundo de la tarde fue un toro bonito de cara, bien hecho, se desplazaba largo con la cabeza por el albero al cual Miguel Abellán lanceó muy bien demostrando así las ganas que traía, no le pegó mucho el picador. Muy inteligente la lidia de Abellán y de su cuadrilla, todo se hizo en beneficio del lucimiento del torero, andando para atrás y sin apenas capotazos. Lo sacó al tercio toreando por bajo y se echó la muleta a la mano izquierda sin más espera para torear en redondo, el toro en sus embestidas tenía mucha transmisión rematando siempre las tandas con pinturería sevillana pero acortando las distancias dando un pase de pecho convirtiéndolo en un cambio de manos largo y muy templado que hizo sonar la música. El torero anduvo siempre con mucho convencimiento y firmeza en todo lo que hacía, ejecutando un extraordinario volapié, leve petición de oreja y vuelta al ruedo. Su segundo toro era muy serio y alto, muy corretón parándose en los medios y obligando a Abellán a ir a por él y tener que torear sobre los pies, también el toro un poco a su aire sin atender los cites del picador y al sentirse la puya se iba suelto sin querer pelea esta condición hizo muy incomoda la lidia en banderilla. Con la muleta volvió a dar clara muestra de firmeza. Con la derecha le sacó algunos muletazos aprovechando las pocas embestidas francas que tenía el astado siempre dejándole la franela puesta en la cara para que no se fuera queriéndolo hacer en cada pase, lo probó con la mano izquierda pero ya sólo quería huir de la pelea dado claras muestras de su mansedumbre. Lo mató de una gran estocada volviendo a mostrar a todos el gran momento en el que está y lo claro que lo tiene, estando así cada tarde, no tengo dudas de que será este un buen año para él. El tercer toro de la tarde primero de Cesar Girón, fue un toro muy serio bien presentado con dos agujas por pitones (cuernos) recibiéndolo él con una larga cambiada en el tercio, toro de embestida incierta con la cara por arriba. En la muleta el toro tardaba en acudir a los cites pero una vez metido en la muleta lo hacía con transmisión con la cara por el suelo y llegándole con la tela prácticamente a darle en el hocico pero siempre en la corta distancia. Lo entendió muy bien y lo toreó largo y con la mano muy baja, al coger la izquierda ya estaba muy mermado de fuerzas costándole mucho trabajo embestir sólo cuando el torero le llegaba mucho y lo enganchaba bien el muletazo era largo templado y sobre todo de mano baja. El toro no quería nada por alto, todo había que hacerlo por abajo. Mató de pinchazo y estocada. En el sexto poco pudo hacer, lo sacó a los medios dándole distancia pero el toro con la cara por las nubes, punteando la muleta en la media embestida que tenía. Lo probó por ambos pitones sin obtener lucimiento, matando de pinchazo, media y descabello. En líneas generales corrida de juego desigual, algo mansa pero con la pudimos ver cosas muy buenas. |
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